Marwan Paz publica en la página web http://sionismos.blogspot.com/2007/01/el-mito-israel-del-terrorismo-islamista.html un artículo en el que se deja claro el origen de la palabra «asesino», la cual aludía a terroriastas suicidas que estimulaban su voluntad fumando hachis. Tras leerlo uno no sabe si se hicieron asesinos por fumar haschis o viceversa, eran asesinos que fumaban. También se dice que los «fumadores pasivos» mueren de cancer, lo cual supone decir que los fumadores de tabaco cometen homicidio, que como dice el Código Penal, no es lo mismo que asesinato.
Este es un fragmento del citado artículo:
Morir por Allah
Si algún viajero intrépido decide abandonar la relativa seguridad de Tel Aviv,Jerusalén o Ramallah, para adentrarse por las inhóspitas carreteras palestinas, eludiendo los Check Point (controles militares israelíes), y viaja hacia el extremo norte de Palestina, puede visitar uno de los castillos de los nizaries o “asesinos”, no demasiado lejos de Tiberiades. Aunque la secta de “los asesinos” (del árabe hashshashín o “fumador de hachis”), tenía su base de operaciones en Irak, poseían fortalezas en otros puntos del mundo árabe como Iran., Siria o Palestina. Sus adeptos, los seguidores de Hasan-i Sabbah, llamado también el Viejo de la Montaña, fueron los primeros “mártires” del mundo islámico, al entregar su vida en misiones suicidas ordenadas por su líder, quien utilizaba el hachis para convencer a sus seguidores, de que si morían en combate o en actos de martirio, viajarían inmediatamente al cielo. Quizás, en el primer ejemplo de la historia del uso de la “guerra psicológica” o el “control mental” con drogas, en el adoctrinamiento de terroristas suicidas.
Muchos autores modernos han indentificado a Hasan-i Sabbah, con una especia de Osama Ben Laden del siglo XII (murió en 1124). Y la prensa israelí ha publicado en numerosas ocasiones, perfiles del Viejo de la Montaña, que intentaban asemejarlo al mismísimo Yasser Arafat o, más recientemente, a Abu Maser, al identificar, directamente, a los miembros de organizaciones armadas como las Brigadas de los Martires de Al Aqsa, Hamas, o la Jihad Islámica, con el mismo perfil de terroristas islamistas fanáticos, que presentaban los nazaries o Al Qaeda…
Marwan Paz